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Prácticas en tiempos de Coronavirus | Great Place To Work® Bolivia

Escrito por Emilia Montero | May 1, 2020 4:00:00 AM

La crisis del Covid-19 está afectando a todas las empresas de manera transversal, limita sus capacidades operativas, genera costos adicionales en la gestión de los empleados y reduce la capacidad de llegar a las metas del negocio.

En una situación tan inesperada las empresas que pertenecen al ranking de Los Mejores Lugares para Trabajar en la Argentina tienen como prioridad cuidar a su gente, medir la eficacia de las medidas de contingencia e intentar prevenir aún cuando el clima de negocios no sea el más prolífico.

La mayoría de estas empresas han generado protocolos de manera muy temprana, relacionados a la suspensión de viajes internacionales y domésticos, hábitos de higiene diaria, etc.

Estas organizaciones tienen aproximadamente el 80% de sus colaboradores trabajando conectados desde sus hogares.

Algunas de ellas, y por la naturaleza del negocio, no pueden enviar a la totalidad de sus filas a trabajar de manera remota, entonces, por ahora, montaron turnos rotativos para, por un lado, evitar que muchas personas se encuentren al mismo tiempo en un mismo ambiente y extremando las medidas de prevención (higiene) y control (toma de temperatura corporal al entrar y salir del establecimiento), y por otro, para permitir que los colaboradores se organicen con otros miembros de su familia dado que, si hay niños pequeños en el hogar, puedan turnarse para cuidarlos. Otras organizaciones optaron por cerrar sus operaciones “hasta próximo aviso”.

La mayor parte de estas empresas optó por utilizar los canales habituales de comunicación (dispositivos de intranet, Workplace, Yammer, Teams, Instagram, etc) no sólo para mantenerse en contacto cercano con los empleados sino también para brindarles información relacionada con del progreso de la pandemia, consejos acerca de cómo proceder en caso de tener síntomas, cursos de diversa índole desde mindfulness, yoga y meditación, hasta recetas de cocina y actividades para compartir con los más pequeños. Estas iniciativas son relativamente fáciles de montar cuando las organizaciones cuentan con la tecnología adecuada ¿Es redundante que las empresas se dediquen a este tipo de información que prolifera frenéticamente por las redes, cualquier red, de manera gratuita? No, claramente no es redundante. Pero es insuficiente. Una vez más, lo primero que hay que preguntarse, es para qué. Cuando los líderes saben cómo están compuestas sus poblaciones de manera específica, pueden llegar de forma mucho más precisa y sensible a sus colaboradores y sus familias. No es lo mismo si en el hogar del empleado hay cinco niños, que dos adolescentes, o si esa persona vive sola o con adultos mayores y por quién o quiénes es responsable financieramente. En estos momentos, todo esto, es parte de las preocupaciones primordiales de los empleados. Por eso estas empresas, además de aprovechar esos canales, utilizan las métricas que ya tienen para afinar el lápiz al momento de acercarse a las distintas poblaciones.

En este sentido, ofrecen ayuda específica según la composición del grupo familiar del empleado, como ayuda psicológica a los adultos mayores y actividades para realizar con los que tienen hijos menores.

Respecto del salario y la fuente laboral, más allá de la confusión acerca de si el feriado puente se contabiliza efectivamente como feriado, o si las organizaciones recibirán algún tipo de ayuda por parte del Estado, estas empresas, se ponen en movimiento siempre con un mismo objetivo: en todos los casos la idea imperante es que se intentará por todos los medios priorizar la fuente de trabajo de los empleados. En este sentido, algunas organizaciones han optado por adelantar vacaciones para las personas que no tienen trabajo para hacer desde sus hogares o que por motivos de fuerza mayor no puedan hacerlo. En línea con esto, la mayoría de las empresas decidieron postergar, “hasta próximo aviso” los aumentos previstos en abril-mayo. Estas son medidas drásticas, porque atacan de manera directa al bolsillo del trabajador. En Los Mejores Lugares para Trabajar, los líderes lo saben, es una de sus preocupaciones y no lo ocultan. Para estas empresas, es simple: los valores no se negocian.

En estas organizaciones, el equipo ejecutivo, con el CEO a la cabeza, lleva la voz cantante no sólo hacia afuera de la organización, sino también hacia adentro. Se mantienen más cerca que nunca con videos diarios ya sea para dar información del negocio (en momentos en donde la gente está más aislada y no todos están acostumbrados al aislamiento), extender mensajes motivadores, o consejos de cuidado personal.

¿Qué iniciativas toman las empresas para que sus colaboradores no se sientan tan lejos entre sí? Algunas realizan hang outs regulares para que los equipos sigan experimentando sesiones conjuntas, realizan ceremonias de reconocimiento virtuales mientras se prolonga el período de distanciamiento social, desarrollan redes de grupos más pequeños para que los colegas no pierdan la relación diaria, utilizan sus tradicionales grupos de recursos para compartir información y vivencias mientras dura la crisis.

Estas organizaciones habilitan espacios de entrenamiento para sus líderes, que deben hacerlo en un contexto virtual. La mayoría de las veces, estos entrenamientos son in house. Aquí reside la clave: los líderes. Ellos tienen una función primordial en los tiempos que corren: llevar tranquilidad a la gente. Al mismo tiempo deben ser honestos con la situación de negocio que se está viviendo, deben lidiar con la ansiedad, la propia y la del resto, deben reconocer, escuchar, cuidar, cambiar programas de trabajo sobre la marcha. A esos líderes los formaron para lidiar con todas estas cuestiones, pero ahora se les subió la vara: el contexto los enfrentó a una pandemia. Siempre se dijo que la función de un líder era compleja. Hoy, es crucial. En las organizaciones pertenecientes al ranking GPTW la confianza está en la base de las interacciones. Estas empresas generan experiencias positivas para todos, entonces, descentralizan la confianza, es decir, todos son responsables por mantenerla, siendo los líderes, los abanderados, los que con sus conductas marcan el camino. A ellos, nuestro mayor reconocimiento.