Basta con pedirle a 10 personas que definan “cultura organizacional” y vamos a obtener 15 respuestas distintas. Sin embargo, después de estudiar a los excelentes lugares para trabajar por más de 30 años y escuchar cómo los colaboradores describen su experiencia en el lugar de trabajo, Great Place to Work® ha descifrado la psicología detrás de la cultura laboral.
La cultura organizacional es cómo se hace, lo que se hace en tu lugar de trabajo. Es la suma de los sistemas formales e informales y de las conductas y los valores, de todo aquello que crea una experiencia para los colaboradores y los clientes.
En esencia, la cultura organizacional es cómo se hacen las cosas en el lugar de trabajo. “Cómo” incluye tanto al sistema formal como al comportamiento informal.
Por ejemplo, la organización puede utilizar un software de mensajería instantánea para comunicarse durante el día (sistema), y también puede estar bien gritarle a un colega para hacerle entender tus puntos (conducta). Los sistemas y las conductas dan a los colaboradores las “reglas del camino” para interactuar con la empresa y entre ellos mismos.
La cultura organizacional es frecuentemente algo que se puede sentir, incluso siendo alguien ajeno a la organización.
Recuerdo la primera vez que entré al lobby de una de las empresas de nuestro ranking Fortune 100 Las mejores empresas para trabajar. A medida que me acercaba a la puerta, los colaboradores que entraban y pasaban por allí hacían contacto visual y decían “hola”.
El empleado detrás del escritorio me saludó cálidamente, me ofreció una taza de café y un asiento cómodo. Había una energía distinta, positiva en el edificio. Mis primeras experiencias como invitado me dejaron un sabor acerca de cómo ellos “hacen las cosas acá”.
La mejor manera de entender la cultura de una organización es preguntándole a los colaboradores. Esto puede ser a través de una plataforma de encuestas de experiencia del empleado como Emprising™.
Vamos a escuchar a algunas personas describir la cultura laboral con declaraciones como “las personas están dispuestas a hablar con sus colegas, compartir lo que saben y tomar la iniciativa para ponerte en contacto con la persona adecuada”, o “las personas siempre son lo primero”.
Los beneficios interesantes como vacaciones ilimitadas y las políticas innovadoras pueden ayudar a delinear la cultura organizacional, pero no construyen un gran lugar para trabajar. La experiencia de las personas sí.
De todos los ingredientes que hacen a la cultura organizacional, las variables más importantes son cómo:
Todas las empresas llevan a cabo estas acciones, pero como en la mayoría de las cosas, no es lo que hacés, sino cómo lo hacés.
La cultura organizacional es importante porque afecta directamente la performance de la empresa en métricas clave que incluyen las finanzas, la retención de talentos, la innovación y el servicio al cliente.
De acuerdo a las investigaciones de Great Place to Work y FTSE Russell, los rendimientos anuales de las 100 Mejores Compañías han tenido un rendimiento acumulado del 1,709% desde 1998, comparado con un rendimiento del 526% para el Índice Russell 3000 durante el mismo período.
Cuando la fuerza laboral es diversa y la cultura organizacional es inclusiva, equitativa y satisfactoria para todos los colaboradores, las personas están dispuestas a permanecer en la empresa por largo tiempo. Los millenials, por ejemplo, tienen 11 veces más probabilidades de dejar la empresa que la Generación X si no ven sus necesidades de propósito satisfechas en su lugar de trabajo.
Cuando los colaboradores experimentan conductas y sistemas de liderazgo inclusivos, ellos están mejor preparados para hablar, compartir ideas y adaptarse al cambio. Esto es lo que llamamos una cultura de la innovación o Innovación by All™.
Los estudios confirman que la felicidad de los colaboradores se traduce en eficiencia, creatividad y productividad. Esto, a su vez, tiene el mismo efecto en los clientes.
En nuestra propia investigación sobre la fuerza laboral promedio en Estados Unidos y cómo se comparan con las compañías que están reconocidos por Great Place to Work® (empresas donde los empleados califican a la cultura de la empresa en altos niveles), encontramos que los colaboradores de las empresas certificadas tienen un 34% más de probabilidades de calificar su servicio al cliente como “excelente”.
Independientemente de si la organización tiene cinco o 50 empleados, no hay mejor lugar para comenzar que el lugar en donde estamos. Iniciar conversaciones con los colaboradores sobre qué hace que nuestro lugar de trabajo sea diferente.
Ellos nos van a dar el lenguaje en torno a lo que hace que nuestra cultura funcione. Para la agencia de marketing Brains On Fire (Cerebros en Llamas), estas conversaciones iniciales conformaron la base de los valores de su empresa.
Una cultura organizacional efectiva no ocurre por accidente, entonces, una vez que tenemos un buen entendimiento acerca de que está funcionando en nuestro lugar de trabajo, hay que aplicar una visión aspiracional.
¿Cuál es la experiencia que queremos que tengan nuestros empleados? ¿Qué queremos que digan los clientes acerca de nuestra empresa? ¿Cuáles comportamientos están dentro y cuáles fuera de nuestros límites?
Basados en el feedback de sus empleados, Brains On Fire creó una serie de “Reglas de Oro”, o valores de equipo para encapsular sus principios y guiar las conductas de los colaboradores, tales como, “claro es mejor” y “desescalar versus escalar”.
Es en este punto donde los líderes deben dar un paso al frente y pasar de las palabras a la acción. La misión, la visión y los valores generalmente están exhibidos en una pared, pero la cultura organizacional es CÓMO lograr esos fines.
Si la integridad es un valor esencial, hay que estar seguros que todos entienden qué significa ACTUAR con integridad. Si la transparencia es un valor esencial, hay que asegurarse de demostrar QUÉ es la transparencia/ CÓMO se ve la transparencia.
Y siempre recordar que en todo momento estamos construyendo, rompiendo o reconstruyendo la confianza en cada interacción con los empleados. Por eso es tan importante hacer que las primeras impresiones cuenten.
Incluso las mejores intenciones pueden no producir la experiencia deseada en los colaboradores, por eso es importante asegurarse de obtener feedback regularmente.
Los colaboradores quieren compartir sus pensamientos y recomendaciones para el cambio y, cuanto más los consultemos, más ofrecerán lo mejor de sus ideas para mejorar el negocio de forma continua. Monitorear y analizar las tendencias de retroalimentación de los empleados a través de una plataforma de encuestas como Emprising™ ayuda a guiar las decisiones estratégicas de Recursos Humanos.
Julian Lute tiene más de 15 años de experiencia como líder de innovación y asesor de confianza global y sabe lo que se necesita para inspirar y liderar equipos de alto rendimiento. Al trabajar con los principales líderes de Fortune 100 Best Companies to Work For®, Julian ayuda a conectar los puntos entre un rendimiento empresarial superior y una experiencia del empleado de primer nivel. Confían en él clientes de diversas industrias como AT&T, McDonald´s, Dow, 3M, Four Seasons Hotels and Resorts, Live Nation Entertainment y Alaska Airlines.
El cambio implica introspección, entonces, naturalmente, los mejores líderes ponen mucho foco en la reflexión. Si lo que buscás es analizar y medir el progreso de tu cultura organizacional, contactanos para conocer nuestra encuesta y evaluar herramientas para transformar tu cultura laboral a través de Emprising™